Todos pasamos por malos momentos. A veces, realmente son graves. Pero en la mayoría de las ocasiones, tan solo se trata de chorradas sin importancia que, sin embargo, pueden amargarnos el día entero: Una discusión estúpida, una mala nota, algo que no sale como querías, mirarse al espejo y no gustarse, envidias, rabietas... mil cosas. O incluso ninguna. ¿Quién no ha tenido un día en el que, simplemente, no se siente alegre, sin que al parecer haya ningún motivo para ello?
Hace algo más de una semana, yo tuve uno de esos días. Ni siquiera recuerdo qué era exactamente lo que me pasaba. Pero no era algo demasiado importante, y de hecho, sabía que era bastante egoísta sentirme triste por eso (fuera lo que fuese). Y sin embargo, no podía evitarlo.
Entonces, por casualidad, leí el siguiente tweet de Carrie Hope Fletcher (cantante, youtuber y hermana de Tom Fletcher, del grupo McFly):
Estoy a punto de despedirme por hoy pero me estaba preguntando... ¿Qué recuerdo feliz utilizaríais si estuvieseis conjurando un patronus?
Para los
Contra los dementores existe una solo defensa: El conjuro Expecto Patronum (que en latín significa"espero un guardián"). Con el, conjuras un animal plateado que te protegerá del dementor.
Más allá de todo el profundo simbolismo psicológico que todo esto pueda tener (el dementor es la depresión etc. etc.) lo que me interesa de todo este rollo que acabo de contaros es: Para conjurar un patronus, necesitas un recuerdo feliz, el más feliz que puedas encontrar. Y a eso viene la pregunta de Carrie. ¿Qué recuerdo utilizarías si tuvieses que conjurar un patronus? Se trata de imaginar que esa preocupación, o lo que sea que te esté amargando el día, es un dementor. ¡No puedes dejar que siga entristeciéndote y te consuma! Tienes que combatirlo con un pensamiento feliz: De un buen regalo, un cumplido, de un viaje, un cumpleaños, unas palabras amables, de un momento familiar, una salida con los amigos... ¡Hay muchísimas cosas! Pronto te darás cuenta de que aquello que te preocupaba no merece tu atención. Si te concentras, verás que hay tantas cosas buenas que te cuesta escoger el recuerdo más feliz.
Yo ya tengo el mío (pero no voy a contaros cual eso, claro está) y os aseguro que es muy efectivo. Así que, ¿a qué esperas?
¡EXPECTO PATRONUM!
Y recuerda...
0 comentarios:
Publicar un comentario